Tarjetas Postales con Disco - Novelty 2

Con el advenimiento de las grabaciones y discos gramofónicos, a fines del siglo XIX, se logró la reproducción del sonido con fidelidad medianamente aceptable. A comienzos del siglo siguiente los discos de pasta para ser escuchados con los gramófonos - o fonógrafos de discos planos - se popularizaron y diseminaron por todo el mundo. Esta popularidad no podía estar ausente en las tarjetas postales por lo que, antes de fines de la primera década hubo varias editoriales europeas y norteamericanas que los montaron en sus postales.

Dentro de la categoría de tarjetas postales denominada internacionalmente NOVELTY (ver Apuntes sobre Postales #15) existe un grupo muy especial y definido que son las postales en cuya superficie se ha grabado un disco.

 En sus comienzos, los discos rotaban a 78 rpm y una púa o aguja, que se introducía en el surco, se movía lateralmente siguiendo la dirección del surco que era de profundidad constante. Ese movimiento de vibración lateral reproducía el sonido original que había sido grabado en el disco y era amplificado por una bocina cónica. Para la rotación del disco el gramófono contaba con un motor a cuerda que se cargaba manualmente con una manivela que sobresalía de la caja base. Estos aparatos también se conocen como Vitrolas o, mejor, Victrolas pues fueron popularizadas por la empresa norteamericana Victor (The voice of the Master con el famoso logotipo del perrito escuchando, supuestamente, la voz grabada de su dueño). Luego, la Victor fue adquirida por la Radio Corporation of America (RCA) y pasó a llamarse RCA Victor.

 

Debido al desarrollo de la electricidad y electrónica, en la década de 1920, se fueron sustituyendo los motores a cuerda por los eléctricos a baterías o linea; la cabeza de la púa o aguja fue remplazada por una cápsula electromagnética y la amplificación del sonido, que se hacía por medio de una simple bocina, por circuitos amplificadores valvulares (más tarde con semiconductores). A pesar de todo se siguió usando la velocidad de 78 rpm hasta que aparecieron (a fines de los ´40s) los primeros discos de larga duración (long play) y mayor fidelidad, que giraban mucho más lentamente: a 33 1/3, 45 y 16 rpm. Había comenzado la era de la alta fidelidad (Hi-Fi). Luego vino el sonido estereofónico.

 

El disco de 78 rpm, que era de bakelita, tuvo su auge entre 1910 y 1950. Son discos grandes, pesados y bastante frágiles mientras que los siguientes eran de vinilo, mucho más livianos, llamados irrompibles. Damos todas estas fechas y velocidades para poder datar las fechas aproximadas de edición de las postales con disco. La mayoría de las postales se hicieron con discos de 78 y 33 rpm. En menor grado en 45. El autor no tiene ninguno en 16 rpm ni conoce que hubieran existido pues la mayoría de los aparatos reproductores familiares no tenían esa velocidad.

 Las Postales con disco

Las tarjetas postales con discos en su anverso consistían en un sustrato normal de cartulina, generalmente algo más gruesa que las comunes, para evitar su arqueamiento. En el frente se adhería, en sus comienzos, un disquito de celuloide o bakelita negra y, más tarde una laca dura en la que era impresionada a presión la espiral del disco. Estas postales son fácilmente reconocibles pues todas tienen un agujero en el centro para pasar el eje del tocadiscos.

Con el llegada de los 33 y 45 rpm en la década de los ‘50s, los discos en postales ampliaron su tiempo de reproducción, que era de apenas un minuto o menos aproximadamente, a soportar una canción completa de dos y hasta tres minutos. Para ello los editores comenzaron a hacer postales de mayor tamaño, generalmente, 20 x 16 cm.

Este tipo de postal debe ser conservada en lugar fresco y seco ya que con el calor o la humedad se abarquillan rápidamente y se vuelven irreproducibles. Nunca deben quedar al sol o cerca de una fuente de calor.

En Argentina en la década de 1960, la editorial “Carton Melody”, domiciliada en la calle Cangallo 996 de la ciudad de Buenos Aires, editó una linda serie de estas postales que llamó “Tarjeta Postal Musical”. Son grabadas en 45 rpm y contienen una canción completa en cada postal. Debido a que son canciones e interpretes muy conocidos tienen hecho el depósito legal en la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (S.A.D.A.I.C) y lo mencionan en el reverso.

También en el reverso un texto impreso dice: “Las Tarjetas Musicales Carton Melody pueden escucharse perfectamente más de 200 veces”. Las primitivas, de 78 rpm, solían soportar una veintena de reproducciones. Esto dependía, fundamentalmente, del estado de la púa y del peso del brazo fonocaptor.



En estos Apuntes del CEITPA iremos detallando, en sucesivas entregas, las novelty más comunes y las más curiosas.



Para la interpretación de los términos cartófilos ver el “Diccionario de Tarjetas Postales” en: http://www.geocities.ws/ceitpa/diccionario.htm

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